No se recomienda conducir durante mucho tiempo un vehículo con un sensor de partículas dañado.
La conducción de emergencia a corto plazo es factible.
Si solo el sensor de partículas está dañado y no hay otros fallos en el motor (como pérdida de potencia, sacudidas anormales), el vehículo generalmente puede arrancarse y conducirse por una corta distancia.Sin embargo, el sistema de control de emisiones falla en este momento y no puede detectar con precisión el nivel de partículas en los gases de escape.
Los riesgos de conducción a largo plazo son significativos.
Riesgo de bloqueo del catalizador de tres vías: después de que el sensor falle, la unidad de control del motor (ECU) no puede optimizar los parámetros de combustión,que resulta en la acumulación de partículas de carbono incompletamente quemadas, lo que puede bloquear el caro convertidor catalítico de tres vías.
Reducción de la eficiencia del combustible: el ECU puede entrar en un modo de funcionamiento conservador y aumentar el volumen de inyección para compensar los datos faltantes, lo que resulta en un mayor consumo de combustible.
Riesgos de fallas en cascada: el aumento de los depósitos de carbono puede causar problemas derivados, como golpes en el motor, intoxicación del sensor de oxígeno o obstrucción del filtro de partículas (GPF).
Regulaciones y restricciones de seguridad
En las zonas en las que se aplican pruebas estrictas de emisiones (como las inspecciones anuales que no requieren códigos de avería en el sistema OBD), el fallo del sensor hará que el vehículo no cumpla con las inspecciones de conformidad.Algunos modelos también pueden activar el "modo hogar cojo" para limitar la potencia de salida.
Operaciones recomendadas:
Si la luz de falla del motor está encendida en el salpicadero pero el vehículo está funcionando normalmente, se recomienda repararla lo antes posible (en el plazo de una semana);
Si se produce una pérdida de energía, un ruido anormal o un humo negro del escape, deje de conducir inmediatamente y remolque al vehículo a un punto de reparación.
Cuadro de referencia para las prioridades de gestión de fallos
Síntoma Distancia de conducción Nivel de riesgo
Sólo está encendida la luz de falla, no hay otras anomalías ≤ 100 kilómetros
Aumento del consumo de combustible + reducción de la potencia ≤ 30 kilómetros Alto riesgo
Ruido de escape anormal/humo negro Prohibido conducir Emergencia
La esencia del daño del sensor es que el vehículo pierde la capacidad de monitoreo de circuito cerrado de las partículas de escape,y el plan de mantenimiento debe evaluarse de manera exhaustiva en combinación con las limitaciones de la tecnología de detección MEMS (como la desviación de la medición de la masa de partículas pequeñas).
No se recomienda conducir durante mucho tiempo un vehículo con un sensor de partículas dañado.
La conducción de emergencia a corto plazo es factible.
Si solo el sensor de partículas está dañado y no hay otros fallos en el motor (como pérdida de potencia, sacudidas anormales), el vehículo generalmente puede arrancarse y conducirse por una corta distancia.Sin embargo, el sistema de control de emisiones falla en este momento y no puede detectar con precisión el nivel de partículas en los gases de escape.
Los riesgos de conducción a largo plazo son significativos.
Riesgo de bloqueo del catalizador de tres vías: después de que el sensor falle, la unidad de control del motor (ECU) no puede optimizar los parámetros de combustión,que resulta en la acumulación de partículas de carbono incompletamente quemadas, lo que puede bloquear el caro convertidor catalítico de tres vías.
Reducción de la eficiencia del combustible: el ECU puede entrar en un modo de funcionamiento conservador y aumentar el volumen de inyección para compensar los datos faltantes, lo que resulta en un mayor consumo de combustible.
Riesgos de fallas en cascada: el aumento de los depósitos de carbono puede causar problemas derivados, como golpes en el motor, intoxicación del sensor de oxígeno o obstrucción del filtro de partículas (GPF).
Regulaciones y restricciones de seguridad
En las zonas en las que se aplican pruebas estrictas de emisiones (como las inspecciones anuales que no requieren códigos de avería en el sistema OBD), el fallo del sensor hará que el vehículo no cumpla con las inspecciones de conformidad.Algunos modelos también pueden activar el "modo hogar cojo" para limitar la potencia de salida.
Operaciones recomendadas:
Si la luz de falla del motor está encendida en el salpicadero pero el vehículo está funcionando normalmente, se recomienda repararla lo antes posible (en el plazo de una semana);
Si se produce una pérdida de energía, un ruido anormal o un humo negro del escape, deje de conducir inmediatamente y remolque al vehículo a un punto de reparación.
Cuadro de referencia para las prioridades de gestión de fallos
Síntoma Distancia de conducción Nivel de riesgo
Sólo está encendida la luz de falla, no hay otras anomalías ≤ 100 kilómetros
Aumento del consumo de combustible + reducción de la potencia ≤ 30 kilómetros Alto riesgo
Ruido de escape anormal/humo negro Prohibido conducir Emergencia
La esencia del daño del sensor es que el vehículo pierde la capacidad de monitoreo de circuito cerrado de las partículas de escape,y el plan de mantenimiento debe evaluarse de manera exhaustiva en combinación con las limitaciones de la tecnología de detección MEMS (como la desviación de la medición de la masa de partículas pequeñas).